¡Boicotean el pregón de Miguel!

Todos esperábamos ansiosos las palabras del maestro, un pregón que sin duda nos iluminaría con su sabiduría, y nos llenaría de velvetinismo. Sin embargo, unos cuantos vecinos belicosos y beligerantes, confundiendo a Boxset con Gallardón, que ya es mucho confundir, impidieron que su voz fuera escuchada con la claridad deseada.
No importa, para la historia queda esa imagen grunch de Miguel desaliñada, sin afeitar y con ropa vaquera (moda Fernando de Herrera dirán algunos), camisa por fuera, y mano en el bolsillo, mientras con la otra lee con desgana una hoja de papel. Qué sencillo y qué complejo al mismo tiempo. Sólo él puede hacer algo así. Del pregón, destaco la frase: «Que Madrid no cambie, que siga así, así de abierta, así de viva y así de imprevisible, como así de osada, de descarada y de golfa, de brillante y de chula», una frase Miguel al 100%, que demuestra que cualquier acontecimiento nacional, sin él, no es tal.
Reproduzco ahora la noticia tal y como ha aparecido en el diario ABC, para vergüenza de los vecinos y reivindicación de Miguel, ese hombre del renacimiento que añade una nueva faceta a su interminable currículum: la de pregonero desganao. Qué grande.
Apenas medio centenar de vecinos boicotea el pregón de Miguel Bosé por San Isidro
CRISTINA ALONSO
ABC MADRID. Parecía una tarde más de pregón en Madrid: niñas vestidas de chulapas; los niños, de manolos; muchas cámaras fotográficas; acentos de lo más variado y centenares de personas reunidas en la Plaza de la Villa, en torno a un balcón del que estaba a punto de aparecer Miguel Bosé para leer el pregón que marcaría el inicio de las fiestas de San Isidro.
Minutos antes de que dieran las ocho de la tarde -hora de lectura del pregón-, en algunos puntos de la plaza, mientras los cabezudos amenizaban la espera, varias personas se repartían bocinas, banderas, silbatos y pancartas, en silencio, sin levantar sospechas. Sólo unas pegatinas amarillas con la leyenda «Gallardón y sus amigos roban a los vecinos. ¡Rebélate!» en el pecho de algunos permitía augurar el boicot que se avecinaba.
A las ocho en punto, el autor de «Amante bandido» salió al balcón, en compañía del alcalde de Madrid. Justo en ese momento, las personas que habían ocultado las «armas» -apenas medio centenar- levantaron los brazos, mostraron sus pancartas e hicieron sonar las bocinas. El saludo de Miguel Bosé al pueblo de Madrid apenas se oyó.
Empujones e insultos
El estruendo provocado por los manifestantes hacía inaudible las palabras del cantante, y las pancartas impedían la visión de grandes y pequeños, que querían ver a Bosé en carne y hueso. Este hecho enfureció a más de un asistente y provocó momentos de tensión, seguidos de insultos y empujones. Mientras, Miguel Bosé forzaba la voz para que se le oyera lo mejor posible, y, aunque pidió por favor en varias ocasiones que le dejaran terminar, las bocinas no se acallaron más que para gritar el ya tradicional «¡Manos arriba, esto es un atraco!». «Que Madrid no cambie, que siga así, así de abierta, así de viva y así de imprevisible, como así de osada, de descarada y de golfa, de brillante y de chula». Ésta fue una de las frases que compuso el discurso del cantante, visiblemente apenado por no poder ser escuchado. Ruiz-Gallardón y Trinidad Jiménez, ambos con semblante serio, seguían la escena a escasos centímetros de Bosé, en el balcón principal del Ayuntamiento.
Gran parte de los manifestantes eran vecinos de los barrios afectados por la última ampliación del Servicio de Estacionamiento Regulado (SER), aunque también había carteles que hacían referencia a las posibles talas de árboles del Eje Prados-Recoletos o a la M-30. Durante la protesta, una joven, con pegatina amarilla de «¡Rebélate!» en la solapa de su chaqueta y bocina en la mano, movía la cabeza con gesto de desaprobación: «Estoy con ellos, yo también he venido a protestar, pero me parece fatal que no le dejen hablar, es una falta de respeto».
«Gracias, Madrid, por abrir tus puertas; gracias por tu luz, por ser como sois, y gracias también a los que no han sabido callar» fue la última frase del cantante. Una vez finalizado el pregón, la gente se dispersó, unos con gesto afligido, otros triunfantes. «Ha sido una pena, le han estropeado a Miguel Bosé un momento irrepetible», afirmaba una «chulapa».
Vuelvan por aquí, por si no lo saben, Miguel nos va a sorprender dentro de poco (una vez más).
7 comentarios
Adso -
cami bosè -
AdsoDmelk -
Trevor Murdock -
-Os quedais en los detalles y no acertais a discernir la gran irresponsabilidad que se cometió contra nuestro ídolo. Fijaos más en él, con su vestimenta bohemia (o "torpe aliño indumentario") y su descuidada barba. ¡Un poco de vista, por favor!
JAVI -
saludos
Martha -
Muero de curiosidad... en esmas.com dicen que la chica de jeans y suèter blanco es Rebeca de Alba, desmejorada y sin maquillaje... en diarios españoles que es una concejal cuyo nombre se me ha escapado por el momento...¿Quièn es ella en realidad?
Un saludo.
Martha
Trevor Murdock -
-Una cosa es que ataquen a Gallardón, y otra que ensucien con sus malos modos las prédicas de nuestro ídolo, sonora poesía dirigida a todo el que quiera oirla.